17 de nov. 2015

Reconocimiento

Reconocerse a través de los demás es una necesidad que cada vez veo más reflejada en muchas personas con las que hablo. La falta de reconocimiento por parte de los demás es algo que se suele echar de menos entre unos y otros, la necesidad de contar éxitos personales y de devanearse de los mismos, suple la falta de reconocimiento que solemos padecer las personas en algunos entornos (trabajo, familia, amigos, etc) pero esto ¿por qué sucede y qué medidas saludables se pueden optar para sentirse reconocido?.
La palabra re-conocido está compuesta de estas dos sílabas, las cuáles denotan que las personas estamos en continuo aprendizaje, y cambio personal, evolutivo, de edad, de circunstancias, sentirse re-conocido es vuelto a ver en el momento actual por uno mismo, siendo la primera acción que tengo que realizar el ser consciente de la situación en la que estoy y cuáles son mis cualidades personales que me hacen sentirme yo mismo otra vez.  Identificarme en mis fortalezas me hace reconocerme y enfocarme en aquello que siento bueno, útil y valioso. Podemos empezar a practicar en nosotros mismos porque es más fácil y reconfortante empezar a saber cómo alimentar nuestro ego, antes de parecer egoístas ante los demás. Puedes empezar por:
  1. Enfocarme en las cosas que me salen bien
  2.  Liberarlas, es decir utilizarlas en mi día a día, en el trabajo, con mi familia, a nivel social
  3. Educarme y formarme en aquellas que me hacen consolidarme más y más, sintiéndome profesional, o personalmente
  4. Multiplicar mis cualidades y cada vez mostrarlas con mayor potencia
Patricia Catalá
orienta psicólogos
 

26 de set. 2015

TRABAJA TU INTUICION


Hay un lugar en tu mente donde se une lo que has aprendido y todo aquello que aceptaste como a que es válido y bueno para ti , a continuación te propongo que hagas evidente aquello que está pero que no traes a tu consciente porque tu día a día no te lo propone pero que tiene que ver con tus valores, con tus emociones con lo que realmente es importante para ti en la vida…TU INTUICIÓN
La intuición funciona enviándonos un mensaje súbito acompañada de una sensación física rotunda sobre algo, esto es la intuición, al contrario si amasamos una y otra vez algo, dando vueltas y vueltas esto es nuestra mente reflexiva no la intuitiva, os propongo que tenemos que escuchar más a nuestra intuición  y también a entender que nos dice…déjate llevar por los mensajes que te envía tu intuición… cómo empezar!!!
1.  Haz caso de tus corazonadas, para practicarla puedes hacerte preguntas sobre cosas que te importan y ver que te contestas…escucha tu interior no lo cuestiones.
2. A veces esta voz interior está llena de prejuicios , es una buena forma de despejar tu intuición de prejuicios dejando descansar tus corazonadas, anotando aquello que has oído en tu interior… y en unos días volver al tema que te has planteado , entonces recibirás más información, vuelve a escribirla y diferencia lo que has escrito días antes de lo que acabas de recibir.
3. Estate abierto a lo que recibes de tu interior, tus sueños…tu cuerpo, tu respiración…cómo sientes!...Escúchate! la verdad está en ti. Trabajar con tu conciencia y tu intuición te conduce a la comprensión de ti, del mundo y de los demás.

“Escucha más a tu intuición que a tu razón. Las palabras forjan la realidad pero no lo son. ALEJANDRO JODOROWSKY

Modo de estudiar un país La razón y la experiencia enseñan que para formar cabal concepto de una pequeña comarca y poderla describir tal como es, desde el aspecto material y el moral, es necesario estar familiarizado con la lengua, pasar allí larga temporada, abundar de relaciones, estar en trato continuo, sin cansarse de preguntar y observar. No creo que haya otro medio de adquirir noticias exactas y formar acertado juicio; lo demás es andarse en generalidades y llenar la cabeza de errores e inexactitudes. Hasta que se estudien los países de esta manera, hasta que se forme de esta suerte su estadística material y moral, no serán bien conocidos. 

JAIME BALMES en “ EL CRITERIO”

Patricia Catalá

Orienta psicólogos

 

31 de jul. 2015

Creer en tu talento te da energía


El creer que el talento está en manos de unos pocos es un prejuicio que nos ha llevado a valorar poco nuestras propias capacidades. Se ha comprobado que el talento no es cosa de los superdotados, sino de todas las personas, todos podemos aportar y hacer surgir nuestras potencialidades si creemos en ellas.
Te has preguntado alguna vez ¿ en qué sueles destacar? o ¿ qué cosas te resultan fáciles de hacer en el trabajo, ocio, hobby, etc..? ¿ en qué eres bueno? ¿ qué es lo que más te gusta hacer?,  cuándo vamos en busca del talento se trata de averiguar en qué parte de nuestra personalidad somos más creativos y sacarlo a la luz, hacerlo visible. Solo averiguando en qué somos buenos, en qué podemos aportar algo nuevo, algo diferente, es cuándo podremos avanzar sentir que somos buenos y que podemos mejorarlo hasta límites insospechados.
Hay algunos investigadores del talento que lo consideran como la base del desarrollo, e insisten en que la importancia está en practicarlo para extraerlo. Es por esto que se tienen que considerar las habilidades, capacidades innatas de las personas, la predisposición natural y buscar qué entornos, motivos, situaciones, etc…pueden sacarlo o desarrollarlo de nosotros mismos.
A continuación te planteo algunas claves para empezar a descubrir tu talento a través de tácticas creativas:

1.      Se independiente en tu modo de pensar, confía en ti, y en tus ideas, opiniones, pensamientos…

2.      Profundiza en el mundo simbólico: las metáforas, las leyendas, los mitos, las historias, etc…puedes crear tu propia historia profesional, porque te dedicas a lo que te dedicas, puedes hacerlo incluso con humor tipo comic, o en otras modalidades...

3.      Escucha visualmente, hazte preguntas para aumentar tu predisposición a la curiosidad: ¿ por qué trabajamos siempre así?, ¿ hay otras opciones de ver esta situación?, ¿ por qué se inventó tal o cuál cosa?...

4.      Utiliza una libreta, pantalla, etc para tomar notas a modo visual mediante dibujos, esquemas, garabatos, trasmite tus ideas, pensamientos, reuniones, a este modo.

5.       Permítete aburrirte para pensar sobre cosas que no puedes en tu día a día y anota tus divagaciones, conclusiones….


Patricia Catalá

Orienta psicólogos

 

20 de juny 2015


APRENDER A VIVIR EL PRESENTE

A lo largo de nuestras vidas hay numerosos momentos, quizá demasiados, en los que no somos conscientes de la importancia de la vida, de las cosas que en ella hacemos y de lo que nos repercuten en nuestro momento actual. Algo muy común a todos nosotros y que hemos aprendido por educación es a enfocarnos en el futuro, a pasarnos la vida haciendo planes a medio-largo plazo, pero ¿y los planes del ahora, y las ilusiones del ya?, parece que esto vendrá y mientras tanto pasamos el tiempo, “tiempo de vida”.

Esperar es un estado mental. Básicamente este estado refleja que quieres el futuro, y no el presente. Que no quieres lo que tienes, pero si quieres lo que no tienes. Rechazas lo que has creado, y deseas lo que aun no alcanzas. No nos damos cuenta que este estado mental de espera, inconscientemente nos crea conflictos internos entre nuestro “aquí y ahora” donde no queremos estar, y el futuro que hemos imaginado y proyectado en nuestra mente que es donde queremos estar. Esto influye adversamente en nuestra calidad de vida, pues como resultado dejamos escapar el presente, que es el único instante en el que podemos hacer realidad nuestros sueños, ilusiones, deseos…

Intentar seguir nuestra atención en el instante presente, e intentar disfrutarlo desde la serenidad y la reflexión, es la manera más idónea para sentir que estamos vivos. Este poder de prestar atención al “instante” hace que tengamos consciencia de nuestros pensamientos, sentimientos, palabras, acciones y reacciones, y hace que podamos expresar más lo que necesitamos, mostrándonos de manera más fiel a nosotros y comunicando más nuestra realidad interior a las personas que nos rodean, esto nos hace ser más coherentes con nuestras necesidades y nos permite generar la energía adecuada para satisfacerlas. Así nuestra vida tiene sentido, porque nos repercute directamente, Ahora!. Y vemos los resultados del hacer, convirtiendo nuestro interior en acción. Es posible que cuando nos conectamos con cierta intensidad en nuestro momento actual, sufrimos miedo por descubrir aquello que estamos viviendo, y que no sabemos como modificar o como reorientar para hacer lo que en realidad queremos. Para ello tenemos que aceptarnos y no tener prejuicios hacia nosotros mismos, y estar más abiertos a lo que necesitamos aprender, para dar el sentido que queremos a nuestros instantes.

Si quieres conectarte con tu presente pregúntate: ¿Qué quieres aquí y ahora, en este mismo instante?, no el año que viene, o mañana, ni siquiera en los próximos cinco minutos. Qué quiero ahora, en este mismo instante.

¡Deja ya de esperar! SIENTETE Y HAZ.

Patricia Catalá

Orienta psicólogos

 

5 de maig 2015


VENTANAS AL MUNDO

En nuestra sociedad y debido a nuestro ritmo frenético, parece que cada vez nos aislemos más unos de otros, y nos comuniquemos menos. Es cierto que cada vez hay más herramientas y avances tecnológicos a nuestro alcance que nos permiten estar más en contacto como Internet, mail, móvil etc…pero desde la distancia, estando mediada esta comunicación interpersonal por la tecnología, y sí nos permite estar más en contacto pero sin vernos, esto es lo que nos da la sensación de incomunicación, en definitiva las personas estamos más accesibles pero menos disponibles.

Según psicólogos expertos en comunicación interpersonal, afirman que la base de la comunicación humana se asienta en la capacidad de empatizar, esto significa la capacidad que tenemos de interpretar e incluso de sentir lo mismo que los demás, observando el movimiento, los gestos y las expresiones de la persona con la que estamos hablando.

Para podernos comunicar y comprendernos entonces, tenemos que estar en frente el uno del otro, cuando esto lo restringimos porque estamos comunicándonos vía mail o chateando, perdemos parte de la información que se nos transmite, seguramente la más relevante.

Si bien es cierto que tenemos que aprovechar la tecnología para comunicarnos no debemos quedarnos solo con la información que se nos transmite desde ella, puesto que merma nuestra capacidad de vincularnos con los demás y de llegar a un punto común.

Es posible, que debido a la cantidad de información que recibimos actualmente desde los diversos medios, sin  poder llegar a atenderla toda, sentimos esta sensación de incomunicación, cuando lo que deberíamos hacer es discriminar esta información que nos llega, para poder atender aquella que nos interese con mayor disponibilidad personal, poniendo atención y predisposición de escucha activa. Esto es reorganizar nuestra disponibilidad personal hacia aquella comunicación que consideramos importante para nosotros en este momento, y tratar de entenderla, porque en definitiva no falla la comunicación, sino la interpretación de lo que se dice.

Por esto es importantísimo ponerle voluntad de explicarse y ganas de entenderse, en resumen ganas de comprenderse, siendo conscientes que la otra persona ni piensa de la misma manera, ni jerarquiza sus creencias en el mismo orden, ni siente, ni se expresa igual que nosotros; por lo que será imprescindible atender tanto a su lenguaje no verbal ( gestos, movimientos corporales, tono de la voz) como a las palabras que utiliza para explicarse, puesto que con ellas describimos nuestro mundo interno.

En el fondo esto es la comunicación, saber del otro más, llegar hasta él y vincularnos.

 
Patricia Catalá

Orienta psicólogos

 

11 de març 2015

La Energía de la Primavera

Desde hace mucho, las personas hablamos de la influencia del clima en nuestro estado de ánimo…. Este pensamiento es cierto y parece haber empezado antes de que la ciencia pudiera darnos razones del porqué, como muchas de nuestras creencias.
 
No podemos huir de la relación que nos une con nuestro sistema solar y los ciclos de la tierra alrededor del sol (las estaciones), la influencia del sol ha desarrollado y ha hecho evolucionar nuestras vidas en la tierra, unidas a las de las plantas y animales, e influidas por el clima y todos los mecanismos que lo componen (los gases que forman la atmósfera y nos protegen, La latitud yendo las temperaturas en descenso del ecuador a los polos, los campos magnéticos, etc…). Si esto varia en función del sol y su intensidad sobre nuestro planeta…¿cómo influye sobre nosotros?

Las personas tenemos un reloj biológico interno del cerebro, que nos despierta y nos hace dormir, que nos provoca hambre a las mismas horas en las que estamos habituados a comer, regula la temperatura corporal, la presión arterial y la liberación de varias hormonas, marcándonos nuestra actividad diaria en función del día y de la noche. Este reloj es llamado científicamente como Ritmos circadianos (alrededor de un día), y actúa en función de la secreción de determinadas hormonas que son activadas por la luz o la oscuridad, en este caso la luz solar. De ahí que estemos totalmente ligados y vinculados biológicamente a la influencia de la actividad del sol.
 
Si las estaciones marcan las diferencias en la intensidad del sol y en la duración de su luz, también determinan nuestros ritmos circadianos, y sería mucha su influencia si dependiéramos de su luz únicamente como lo hacen los animales y las plantas. Desde un punto de vista evolutivo, resulta ventajoso para nuestro cuerpo el regularse a través de estos mecanismos puesto que le permite ahorrar energía, para tenerla cuando más la necesite.

Este reloj biológico es un tema de profundo estudio a nivel científico, actualmente no sabemos ciertamente su evolución, si que está regulado por el núcleo supraquiasmático y el hipotálamo, y que una de las hormonas que regula este ritmo biológico es la melatonina, hormona producida por la glándula pineal en respuesta a la oscuridad de la noche, que estimula el sueño y ayuda a regular nuestro reloj biológico.

Hay personas más sensibles a estas diferencias de luz por su genética, metabolismo…etc, y como todo en primavera renace y despierta, en las personas se manifiestan ciertos síntomas, como más activación de la habitual, más energía, mayor motivación por las actividades que realice.

Tal vez nuestra conexión con el Universo haga que sintamos sincronías con él que muchas veces no sepamos explicar, pero la ciencia continua investigando y encontrando más respuestas a nuestras preguntas.

Utilicemos la ciencia para aclarar nuestras dudas.

Patricia Catalá

Orienta psicólogos

15 de gen. 2015

Compromiso

Convertir una promesa en realidad o cumplir lo prometido. El compromiso es un valor necesario para cumplir nuestra misión en cualquier lugar de la vida (familia, hijos, pareja, trabajo, empresa, amigos etc…)
·         El compromiso me hace concentrarme y dirigirme a aquello con lo que me he comprometido, tomando una dirección concreta y trabajando continuamente para despertar día a día mayor inquietud en mejorar y lograr esto en que me he comprometido.
·         La clave del éxito en muchas cosas, está en la capacidad de comprometernos con ellas evitando la rutina y tomando continuamente iniciativa y creatividad en ellas, tomar nuevas maneras de vivir, nuevas formas de acortar procesos, nuevas maneras de mejorar nuestras relaciones, etc…
·         El compromiso nos lleva a disfrutar y a apasionarnos intelectual y emocionalmente con aquello que hacemos, siguiendo con tenacidad y perseverancia esto que hemos elegido.
·         Es cierto que con el paso del tiempo el compromiso puede decaer porque nos acostumbramos, nos acomodamos, nos cansamos de llevar esta dirección y empezamos a decaer en hacer las cosas con las que nos hemos comprometido de manera menos interesada, menos eficaz, etc…
¿Cómo recobrar este entusiasmo y volver a recuperar de nuevo nuestro compromiso?
Me puedo preguntar:
¿Cuántos años llevo haciendo esto, o estando aquí?
¿Cuál ha sido mi aportación?
¿Me he preparado cada día para mejorar mi aportación?
¿Qué nuevos retos me planteo?
¿Existe en mi alguna resistencia? ¿Cuáles? ¿Rutina, dejadez, emociones negativas?
Empieza a comprometerte de nuevo: lo único que puede aportarnos cambios es mantener una actitud comprometida, es decir conocer bien qué queremos y qué vamos a hacer para mantener nuestra actitud de continuar cuidando aquello que hemos elegido querer ( puede ser trabajo, hijos, pareja, amigos, etc).
Por ejemplo en el trabajo si quiere comprometerme de verdad tengo que:
·         Conocer los objetivos, cuál es mi misión y los valores que persigo con mi trabajo,
·         Sé y conozco bien mis funciones y responsabilidades
·         No espero a que me digan lo que tengo que hacer, lo hago
·         Doy la cara por mi trabajo, mi empresa, mis compañeros, mantengo el prestigio con mis actos diarios
·         Me responsabilizo de lo que hago, muestro iniciativa, trabajo, entusiasmo.
¿En qué te has comprometido?
Patricia Catalá
Orienta psicólogos